SANTO DOMINGO:CIUDAD DE LA ALEGRIA

La nueva campaña de Santo Domingo, capital dominicana y Ciudad Primada de América, la presenta al mundo como la Ciudad de la Alegría. “Santo Domingo es alegría”, es el eslogan de la campaña de la ciudad, y resume una de las principales cualidades de este urbe de más de 3 millones de habitantes, una de las más importantes del Caribe. La capital dominicana es un destino turístico con un amplio ambiente colonial, que muestra la alegría de vivir característica de la cultura local y del mundo caribeño de sol y mar. Es una interesante metrópolis cosmopolitita que acoge las más modernas tendencias del arte, la cultura, la música y la gastronomía que se mezclan con las tradiciones resultado de un proceso histórico que mezcló la herencia del conquistador español y los esclavos africanos, a su vez enriquecidas en el tiempo por otras influencias europeas y en años más recientes, por la diversidad cultural estadounidense. El programa de “Marca Ciudad”, impulsado por el Clúster Turístico y las Alcaldías de la Mancomunidad del Gran Santo Domingo, propone realzar la alegría como característica inherente a la República Dominicana y en particular a su Capital, donde cada visitante es un amigo, hermano con lazos fraternos que van más allá de la calidez del sol y las hermosas playas. Santo Domingo como “Ciudad de la Alegría” expresa la alegría que se respira en la música, el color humano, la historia, el arte, las expresiones culturales, la artesanía, la libertad, verdor y en las aguas mansas y a veces bravías del mar Caribe que salpican el Malecón de la ciudad, una de las vías de ambiente marino más extensas y hermosas del Caribe. La alegría está por todas partes, en el malecón con sus tradicionales carnavales y festivales de Merengue (el ritmo folklórico del país), sus variados lugares de diversión y en los paseos en coches tirados por caballos, contemplando la luna o mirando las aguas cristalinas del mar Caribe. En el casco colonial, la alegría está en los recorridos, guiados o no, por los monumentos coloniales, testigos de una época de grandes hazañas, y en la variada oferta de restaurantes, bares y lugares de diversión.